El soporte para Windows 10 finalizó el 14 de octubre de 2025. Desde esa fecha, ya no se ofrecen actualizaciones de seguridad ni asistencia técnica. Para mantener la protección, se recomienda actualizar a Windows 11, optar por las Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESU) o planificar el reemplazo de dispositivos y la migración de datos.